Resulta que Pentax Japón (el cuartel general de la firma) ha reconocido finalmente el problema de las «manchas» en el sensor de la K-5 con las que salieron de origen unas cuantas cámaras de este modelo. De este tema se ha hablado mucho por los foros de la red en los últimos tiempos.
Pentax lo ha calificado como «gotas de agua» y reconoce que es un problema generado durante el proceso de fabricación que no se puede solucionar con los métodos habituales de limpieza. Parece que ha afectado sólo al primer lote producido, por lo que pide disculpas y ofrece la reparación gratuita, se supone que a corto plazo, en cualquier SAT de la firma.
La nota de Pentax no aclara en que consiste la reparación pero me atrevo a intuir que puede ser una de estas tres posibilidades: o bien una limpieza a muy a fondo del sensor, o bien una sustitución de la capa o filtro afectado, o bien la sustitución total del sensor con todos sus filtros y capas.
Lo cuenta «Fotoactualidad» y, aunque era una cosa cantada, constituye una muy buena noticia para los usuarios de Pentax que hayan tenido la mala suerte de que les haya tocado una.
Como Pentax no facilita, al menos yo no lo he visto, los números de serie del lote afectado, a todos los poseedores de una K-5 les recomiendo que hagan la foto típica sobre un fondo neutro y que con los dedos cruzados busquen las malditas gotas de agua. Con un poco de suerte no aparecen, pero si no es así, Pentax se hace cargo del problema.
Noticia en «Fotoactualidad» ; Nota de «Pentax» japón (en inglés)