Ideal para no ir demasiado cargado en los viajes
Con su nuevo sistema de análisis y en colaboración con DxO Mark, «Dpreview» publica hoy el análisis en profundidad del zoom todoterreno Tamron 18-270mm F/3.5-6.3 Di II VC PZD.
No me voy a extender en comentar sus resultados. Bueno, en realidad no voy a decir nada. En el análisis se ve muy claramente sus prestaciones y simplemente diré que, como a todos los todoterrenos, le sobra todo lo que pase de los ciento y pocos milímetros de focal.
Eso si, es un objetivo cómo, resultón, e ideal para foto de viaje sin tener que llevar un saco de objetivos a cuestas, y además, su precio sobre los 650 dólares, también es relativamente contenido.
En el análisis obtiene una nota global de 73 sobre 100, y «Dpreview» lo considera razonablemente bueno si nos olvidamos de las focales largas y si no consideramos su excesiva lentitud de AF respecto a sus competidores.
Estos son los «pros» y los «contras» del análisis:
Conclusion – Pros
- Very useful 15x zoom range
- Good image quality at wideangle
- Quiet autofocus
- Reasonably effective image stabilization
- Compact and lightweight
Conclusion – Cons
- Rather soft at telephoto, especially wide open
- Strong distortion across most of the range
- Chromatic aberration at each end of the zoom (most pronounced at telephoto)
- Slower autofocus than its peers
Y al final, en las conclusiones, hay una galería de muestras hechas con la Canon 650D para que podáis valorar si la cosa vale la pena o no. He mirado alguna imagen a tope de focal, y no están mal, o por lo menos yo no aprecio demasiada diferencia con el angular. La verdad la caída de rendimiento de angular a tele no se nota demasiado, al menos a diafragmas dulces alrededor del F8. Perola verdad sea dicha, en angular (quizás sea por la cámara ¿?), pero tampoco hay como para tirar cohetes.
Os pongo también el enlace al análisis de DxO Mark, donde a pesar de ser el mismo análisis y el mismo objetivo, los resultados numéricos parecen bastante peores. En este caso el resultado global se situa mucho más cerca del «pobre» que del «excelente».
