Seguro que Melchor, Gaspar y Baltasar estarán encantados de "echaros" un curso de fotografía, si se pedís con cariño.
Iker Morán publica hoy en su blog personal un artículo que titula: «Regalos fotográficos de última hora».
Va dedicado a aquellos de los que «Papa Nöel» ha pasado olímpicamente, pero aún confían agarrándose a un clavo ardiendo en los Reyes Magos, que como son tres y de todos los colores, si nos ven cara de pena igual se apiadan de nosotros y nos echan algo que no sea carbón negro o cosas peores aún.
El artículo es una lista de posibles regalos de todo tipo, con los enlaces correspondientes para poder escribir correctamente la carta a Sus Majestades, que este año utilizarán «tablets» para su recopilación más eficaz y rápida.
«Por alusiones», en la primera frase del párrafo de Iker que os pongo a continuación, me ha parecido muy oportuno recordarnos a todos que un buen curso de fotografía puede ser, en definitiva, un regalo mucho mejor que la última cámara del momento. Por eso me permito reproducir aquí el párrafo completo.
¿Mucha cámara y poca idea? A veces pasa. El mejor remedio es un buen curso de fotografía. Algunos modelos de cámaras vienen con algún incluido, pero si no es el caso, a los chicos de Naturpixel se les da muy bien eso de montar cursos prácticos en plan photowalk. Si preferimos la teoría, en CasanovaFoto tienen una agenda muy completa (captura, retoque, iluminación…) y para todos los niveles. Los que anden por Barcelona también pueden echar un vistazo a los cursos de MaxStudio. Sólo por poder trabajar y aprender en su estudio, merece la pena.
Ni que decir tiene que cursos hay muchos más y en muchos más sitios. Sirva esta nota solo como recordatorio.
El saber no ocupa lugar. Solo exige un poco de tiempo y esfuerzo, y cuesta un poco de dinerito, pero el resultado seguro que vale la pena.
«Felices Reyes para todos»
Felices Reyes! 🙂