El mismísimo día de Reyes, mientras los niños están enloquecidos desenvolviendo los regalos de Sus Majestades, y donde yo mismo me imagino detrás de la presa de un pantano totalmente lleno de información privilegiada y totalmente embargada que mañana mismo abrirá sus compuertas y nos inundará a todos de buenas nuevas fotográficas relacionadas con el CES, nuestro querido «dúo dinámico» nos sorprende con una extensísima toma de contacto y análisis en profundidad de la última DSLR Canon, la 6D.
La toma de contacto es descriptiva, pero a fondo, y la parte de análisis somete a la 6D al exigente bodegón de pruebas que normalmente utiliza DSLR Magazine para hacer aflorar «las vergüenzas» de hasta las más reputadas maquinitas y objetivos.
No os voy a desvelar las sorpresas, que alguna hay, y tampoco me atrevería a hacer un resumen, pues la prueba es muy extensa y dice muchas cosas.
Solo tres apuntes:
- El módulo AF, huy, huy, huy, aunque solo sea a veces.
- Los JPG de Canon siguen siendo una de las asignaturas pendientes de la firma. Mejor RAW, de siempre, pero aquí más.
- El Sr.Canon se ha asegurado bien de que existan serias diferencias entre la 5D3 y esta D6, diferencias que, según él, justifican los más de 1000 euros de una respecto de la otra.
Pasar y mirar. Es muy interesante. Y si estáis pensando en ella, es absolutamente obligatorio.
Al igual que en Nikon con su D800/D600, yo como aficionadillo me ahorraba los mil euros.
No veo mucho análisis, y de profundidad, diría que se acerca más a la pileta de bebés mas que al foso de saltos de trampolín. Pero bueno, es el designio de los tiempos. Casi encuentro más de caña al que se quiere imponer como doble frame– para que otros cuarto y mitad impongan su relativo no importa el tamaño de captador porque, ya se sabe, en era digital no importa el factor de ampliación de digamos copia final sea bien en papel o sobre pantallas diversas–, y claro y por supuesto al malvado y maldito bloque espejo pentaprisma cuando no es pentaespejo, que análisis de la propia cámara.
Una tendencia preocupante por lo sólidamente establecida es la gran diferencia entre gamas no ya solo en lo concerniente al cuerpo sino también en la calidad de imagen captada procesada. Si el cuerpo es más barato, obviamente, en sus potencialidades estará capado respecto a los de mayor precio. Cosa esta que no obedece a razón salvo puramente economicista cuando hay grandes diferencias en el sensor y su calidad de procesado. Si Fuji rompe esta tendencia y saca la nueva x 100 con la misma calidad y estética de imagen que las con bayoneta es algo a tener en consideración a la hora de apoquinar.
Salud y saludos.
Afortunadamente las barreras de «lo profesional» con lo de «usuario avanzado» cada vez se reduce más en prestaciones y calidad de imagen final pero que duda cabe que siempre habrá una diferencia sustancial en la calidad constructiva y uso de materiales. En definitiva cámaras para durar años de uso intensivo y cámaras un tanto mantequilla pero de resultados igualmente magnificos.
A gossarrr!!!!