Con lo fácil que sería normalizarlo todo.
Este es un tema, si queréis muy tonto, pero que realmente me ha hecho bailar la cabeza más de una vez hasta tener que dejarlo por aburrimiento. ¿ Por qué pasan estas cosas ?
Se trata de la relación de aspecto de los diferentes formatos de impresión, y para complicarlo más, con los diferentes formatos de sensor.
Lo toca en un breve artículo Fernando Galán en CSC Magazine y ha venido a recordarme el caos que aún impera en este proceloso mundo de la copia impresa.
La cosa es muy sencilla. Los diferentes formatos de papel fotográfico, ya sea químico, ya sea de impresora, no tienen todos la misma relación de aspecto, y ello va a suponer siempre un cierto recorte de la imagen original. Si la salida de nuestro trabajo o afición va a ser finalmente una copia impresa, y somos cuidadosos y rigurosos (sobre todo en fotografía de paisaje urbano o rural) , deberíamos tenerlo en cuenta al componer la imagen en el mismo momento de la toma.
Si además complicamos el tema tomando en consideración la relación de aspecto del sensor, que suele ser 3:2 en las DSLR APS-C o FF y 4:3 en las M43, la cosa se complica un poco más y deberíamos llevar a cuestas una calculadora (o el telefonillo con su correspondiente «app», en versión moderna) para componer adecuadamente sin desperdiciar nada.
Pero aún hay más. Si lo que queremos finalmente es disfrutar de algo parecido a la perdida sensación de una proyección de diapositivas, deberemos pensar en que la pantalla será un televisor gordo de formato 16:9. La cosa empieza a complicarse a niveles peligrosos, y yo desde luego, no tengo la solución.
Y ahora la idea: Lo que igual no sería ninguna tontería es que las cámaras, tan inteligentes como son ahora, llevaran unas marcas seleccionables con los diferentes tipos (relaciones de aspecto) de los formatos de salida, papel, televisor, o personalizable, y esas marcas aparecieran en el visor para ayudarnos a componer con todo el cuidado del mundo. Eso estaría «chupao» en el «live view», pero sería mucho más complicado en un visor híbrido, y mucho más difícil en uno puramente óptico.
Dejo la idea encima de la mesa para que algún astuto fabricante se ponga a ello. Con el tema del «copyright» no habrá problema, seguro que nos ponemos de acuerdo.
Yo muchas veces hago las fotos 2:3 dejando un poco de «aire» en la composición cuando no tengo claro si finalmente la voy a dejar una vez procesada en 1:1 o 4:3. En este sentido paradojicamente preferiria un visor con cobertura del 90%.
Es la pelea de todos los dias en la tienda dnd trabajo, la gente revela sin pensar la relacion de aspecto, me parece normal tb, pero la cosa se agrava con los malditos y sus pantallones en 16:9. El cliente se lleva o una copia de medidas inclasificables o un retrato cabeza cortada de lo mas vanguardista. Sumado a la grandiosa calidad de sus terminales telefonicas en lo fotografico pues eso, resultado desastroso. buena idea adolfo, hay que hacer algo, estado de alarma.