A ver. Aquí me vais a permitir que sea parcial (que es lo contrario de imparcial). La Olympus XZ-10 es una cámara que me cae antipática. Seguramente será simple y llanamente porque antes de su aparición mucho se rumoreaba que Olympus iba a sacar el relevo de la estupenda XZ-2 y la posible XZ-3 igual iba a inaugurar la línea de compactas Olympus de sensor grande. En lugar de eso apareció la XZ-10 que fue justamente en sentido contrario. Sensor todavía más pequeño y prestaciones decentes pero no estupendas. Por eso desde entonces no me la miro con buenos ojos. Lo siento.
Reconozco, eso si, que es una compacta muy pequeña, muy digna, y con un zoom muy versátil y sobre todo luminoso de 26-130 mm f/1,8-2,7.
Nuestro querido «duo dinámico» ha salido a pasear con ella y nos cuenta que tal les ha ido en su «toma de contacto».