Luminous -Landscape nos enseña el método para evaluar papeles fotográficos para inyección de tinta

"Peludo asunto", si señor, abordable, sobre todo si te lo explican bien, pero "peludo" al fin y al cabo.

What’s the Gold Standard of Inkjet Papers ? Esta es la pregunta a la que intentan responder en un artículo los fotógrafos de «alta gama» Mark D. Segal y el mismísimo Michael H Reichmann, el amo de Luminous-Landscape.

El artículo sale de un análisis que les solicitó Ilford USA sobre la calidad de sus papeles para impresión de tinta, pero lo que nos cuentan va más allá de un simple análisis. Se centra en el método que han usado para la evaluación y en sus consejos para escoger finalmente un papel que responda a nuestros gustos y/o necesidades.

Los autores ya adelantan algo que no por sabido es menos cierto: la respuesta a la pregunta «What’s the Gold Standard of Inkjet Papers ?» (más o menos ¿ cual es el mejor papel para impresoras de inyección de tinta ?) es esta: «Ninguno – todo depende de las preferencias personales y del gusto de cada uno»

El análisis y lo que nos cuentan se refiere a una amplia gama de papeles Ilford, que es quien les encargó el análisis. Comentan que extenderlo a otros fabricantes es igualmente posible con el mismo método, lo que pasa es que entonces el proceso de comparación y selección se complica de forma exponencial, vamos, que podríamos acabar locos.

Estos son los puntos explicados y analizados en el proceso:

1. Descargar los perfiles del fabricante, ya que queremos hacer copias con ellos.
2. Hacer nuestros propios perfiles personalizados, para compararlos con los perfiles del fabricante.
3. Observar los perfiles.
4. Escoger cuidadosamente las imágenes de prueba para mostrar toda la capacidad de los papeles a probar.
5. Imprimir copias con las imágenes de prueba y varios perfiles en todos los papeles que queramos probar.
6. Examinar atentamente las copias y la impresión visual que transmiten
7. Medir el nivel de blanco y también la densidad máxima obtenida.
8. Y finalmente, sacar nuestras propias conclusiones.

La verdad es que no está nada mal, pero un poco «enfollonado» para un afinionadillo ¿ no ? Al menos para mi.

Desde mi supina ignorancia confieso que todo el jaleo de la gestión de color es una de mis muchas asignaturas pendientes, y dentro de ella, el proceso de impresión es la más pendientísima.

Paciencia. Por ahora me consuelo reconociendo que no he hecho aún ninguna fotografía lo suficientemente interesante o bella como para merecer una impresión de campanillas.

¿ Que, os atrevéis con el asunto ?

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