Mark Dubovoy es un fotógrafo de los que yo llamo de alta gama que colabora de forma muy habitual en la WEB de Michael Reichmann Luminous-Landscape.
Hoy publica un artículo que titula «Divergencia y Sencillez». En realidad es un ensayo que tiene dos bases o ideas fundamentales:
En primer lugar la convergencia entre la fotografía y el video ha hecho felices a muchas personas, pero a otras les ha supuesto un montón de complicaciones innecesarias y muchas dudas.
En segundo lugar se añora el concepto sencillez, donde solo lo esencial queda evidente, y lo superfluo queda oculto para que no estorbe.
Finalmente acaba con un resumen de lo que en su opinión debería ser una verdadera cámara para «solo» hacer fotos.
Pienso que es interesante su lectura pues refleja bastante bien la opinión de todas las personas que (como yo), sin despreciar el video, no estamos en absoluto interesados en él.
A todo lo anterior sumo por mi parte la sospecha de «zapatero a tus zapatos», en el sentido de que quizás un sensor que pueda hacer video y foto no es el óptimo ni para una cosa ni para la otra, comenzando por su resolución, y siguiendo quizás por otras características más serias y específicas.
Por eso ya he comentado más de una vez que los principales fabricantes que se precien deberían tener algún cuerpo especializado en video y algún que otro en blanco y negro, pero no a precios Canon y Leica, claro. Así cada cuerpo estaría especializado y optimizado para lo suyo. No se, igual es una tontería, pero yo sigo con la mosca detrás de la oreja.
El ensayo está naturalmente en inglés, pero si no lo domináis y sois dominados por él, como es mi caso, el traductor Google ayuda mucho y se entiende bien.
Si os sobra un rato, no está mal.