La tabla de la verdad
Hace ya un montón de tiempo, a final de Mayo del 2010 cuando todavía faltaba medio año para que esta paliza diaria que se llama Fotochismes iniciara su andadura como regalo envenenado de un buen amigo, Germán Pierre ya publicó un primer análisis del objetivo manual Zeiss Planar T* 50mmF2 MAKRO ZF.2, y lo hizo con la Canon 5D: análisis del 2010
Ahora, con su flamante y limpita Nikon D600 Germán rehace el análisis sometiendo al mismo cristalito al más exigente sensor de 24 Mpixels, justo el doble que antes.
El análisis es como siempre muy completo, tocando todos los puntos esenciales: nitidez, contraste, distorsión, viñeteo, aberraciones cromáticas, todos ellos temas de importantes en el resultado y la sensación de la imagen final..
Pongo aquí los “a favor” y los “mejorables” de las conclusiones del artículo, e incluyo arriba la tabla de valoración, con las notas parciales de cada concepto analizado.
A favor :
- Calidad óptica global excelente.
- Construcción, manejo y acabados sobresalientes.
En contra:
- Distorsión geométrica en distancia mínima de enfoque elevada.
Mucho metal, como antes se hacían las cosas.
Mirando la tabla de valoración podemos ver que, la nota media en el apartado calidad de imagen es de 8,68 sobre 10, con un 9 en definición, que no está mal. Lo peor es un 7 en distorsión geométrica, que tampoco está mal.
La nota global baja un poquito hasta 8,33 sobre 10 pero principalmente porque se paga su nombre.
En fin. Como conclusión, y leyendo lo que cuenta Germán, me atrevo a decir que el doblar la exigencia del examinador no le pasa una factura demasiado grande al cristalito, lo que sin duda da fe de sus buenas hechuras.
Hace ya unos años Obama y su «Yes we can» inició un cambio de tendencia que quizás el tiempo ha descafeinado un poco. Hace pocos días unos señores bajo el mismo eslogan, » Podemos», han desestabilizado el cotarro de los de siempre. Y hace ya unos cuantos meses a los señores de Sigma parece que se les apareció el Espiritu Santo en forma de chuleta óptica y han empezado a diseñar una serie «Art» de coge pan y moja y a precio razonable. Eso también desestabiliza un montón. De las tres cosas me congratulo bien sinceramente. Que no decaiga.
Ciertamente, la aparición de la serie ART ha hecho modificar el prisma con que nos miraremos los objetivos a partir de ahora, y no solo por su rendimiento y calidad, sino sobre todo por su precio. ¿ Y por qué me meto yo donde no me llaman ? Sigo teniendo malos días, no me lo toméis en consideración.
En fin, que pudieron, y lo hicieron. Bien por Sigma.
Re-análisis completo en «Digital Camara Lens» ; Galería de muestras (pendiente – ya avisaré)
Y no olvidéis, además, que Germán tiene una enorme base de datos. Hay muchísima información.
