Muy breve:
Adorama, que debe ser la segunda tienda más grande del mundo después de B&H, anuncia su propio artilugio volador con nombre de arma de destrucción masiva: se llama Aries Black Bird X10, y tiene todo lo que tiene que tener.
A mi estos chismes no me hacen ninguna gracia, pero reconozco que pueden tener su utilidad. Aún así prefiero tenerlos lejos.
Os lo cuento porque este no me ha parecido muy caro (dentro de su mundillo) y si muy completo. Lo facturan a 800 dólares y permite realizar acciones de combate de 12,5 minutos, pues la batería dura 25 minutos.
Como yo de Ingeniero Aeronáutico tengo lo mismo que un político de honrado, no soy capaz de entender como maniobran estos bichos que con solo variar la velocidad de sus motores de forma individual, ya que los ejes no se mueven, pueden hacer todo tipo de cabriolas.
Parece que ahora se van a poner todos los fabricantes las pilas con éstos cacharros por que hace unos días teníamos la noticia por parte de, nada menos que, GoPro, el cual va lanzar a finales del 2015 un bicho de éstos con su propia cámara. Miedo va a dar mirar «pa riba» dentro de poco.