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Franz de Copenhage se pasea por Nikon: Nikon1 9-30mm f/1.8-2.8, adaptador con obturador, y kit de lentes modular.

La sombra del insigne profesor es alargada

La sombra del insigne profesor es alargada

Es evidente que la sombra del excelso profesor Franz de Copenhage es muy alargada y es también evidente que en estos momentos se está dando un paseo por los centros de desarrollo de Nikon. para quien lo dude voy a someter a vuestra consideración tres pruebas de ello, aunque reconozco que unas son más propias del T.B.O. que otras.

Juzgar vosotros mismos. Yo las he ordenado según mi criterio de menor a mayor influencia del insigne profesor. Hételas aquí:

El zoom universal por excelencia.

El zoom universal por excelencia.

Patente 1: la más normalita.

No está mal, e incluso es de agradecer que Nikon aun se acuerde de que hubo un día que inventó un sistema que se llamó Nikon 1 y de vez en cuando nos sorprenda con algún nuevo artilugio relacionado con el mismo.

El de hoy es un zoom universal y muy luminoso que si dios quiere y la patente sigue adelante se materializará en un Nikkor 9-30mm f/1.8-2.8, equivalente a un universalísimo 24-81mm que ya nos gustaría en FF.

Un nuevo zoom Nikon 1

¿ Para qué ?

¿ Para qué ?

Patente 2: un tanto «curiosa»

Va Nikon y se le ocurre inventar un adaptador (para adaptar no se que con qué, aunque me parece que es para Nikon 1) con obturador incluido. Para que puede servir una cosa así ? Pues a mi, a si de pronto, no se me alcanza, pero admitiré gustoso todo tipo de especulaciones e incluso apuestas, con la condición, claro está, de que La Banca (que soy yo) siempre gana.

El obturador central

La repañocha, oiga.

La repañocha, oiga.

Patente 3: el acabose, vamos.

Oiga, ¿ que a uno le gustaría tener un zoom 20-200mm F2,8 ?, por ejemplo. Pues nada, va, y con las piezas del nuevo kit, se lo fabrica y punto.

Nikon ha enloquecido y pretende patentar un sistema modular de lentes para que en plan «hágaselo Vd. mismo» el sufrido usuario pueda comprar los elementos correspondientes y ensamblarlos para autoconstruirse el cristalito de sus amores. Si eso fuera posible estaría muy bien, pero me teme que nuestro querido Franz se ha pasado un poquillo con esa propuesta. Si ya es difícil que un conjunto de sesudos ingenieros ópticos definan y construyan un montón de lentes que agrupadas y pegadas o ensambladas adecuadamente produzcan una imagen decente con las mínimas distorsiones y aberraciones posibles y con una nitidez y un contraste guapo, está el patio como para hacer eso ensamblando sofisticadas piezas de Lego óptico.

Yo tenía entendido que los probos japoneses empezaban la jornada laboral con una sesión de Tai Chí, pero creía que la botella de Sake la dejaban aparte. Ya veo que no.

Contrúyaselo Vd. mismo

Todo eso lo cuenta, y sin despeinarse, la gente de Nikon Rumors

adolfo

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