- Pregunta expectante:
¿ Como serán los televisores del futuro ?
- Respuesta sincera:
Y yo que coño se. De lo único que estoy seguro es de que incluirán la correspondiente obsolescencia programada para que a los pocos años queden hechos unos zorros y no tengamos otro remedio que cambiarlos para mayor gloria del sistema y de sus leyes de crecimiento exponencial – si no me cabreo – con el que ha sido sabiamente diseñado.
Como un diálogo como el anterior, amen de ser sincero y real, es un poco, como diría yo, poco elegante, nada correcto políticamente, e impropio de un blog serio y sesudo como este, lo que de verdad os quería contar es que José Luis, un miembro de nuestra peña, me envía un enlace a un artículo tecnológico divulgativo sobre esta cuestión.
Señoras y señores, damas y caballeros, gentes de bien en general, etc, etc….. (y aquí va eso de que los políticos y banqueros quedan exentos), demos la bienvenida a los «nanocristales cuanticos».
Y hasta aquí puedo leer, pues entre otras cosas, uno ya está muy mayor para creer en milagros, y mucho más si son cuanticos, donde las cosas pueden ser y no ser, estar y no estar al mismo tiempo, y donde todo es cuestión de historias y de probabilidades.
Lo explican con todo detalle, bueno, más o menos, los chicos de Xataka