La inapelable prueba del delito.
Mira tu que es duro el oficio de espía ¿ no ?, y no lo digo por mi, ni tampoco por las intrépidas aventuras de los James Bond’s de turno, siempre rodeados de mozuelas increíbles y haciendo piruetas que harían enrojecer de envidia al mismísimo «Cirque du Soleil». Me refiero a la abnegada labor de hormiguita fisgona que permite encontrar, por ejemplo, en un perdido video promocional de la nueva, nada esperada, y menos deseada EOS-M3, una velada referencia a un objetivo sobre el que se puede seleccionar la abertura F1.2. Como tal cosa no existe, además en el video no se hace ninguna referencia al uso de un adaptador EF-M, y para más «inri» el objetivo que aparece en la imagen es pequeñito, el espía de turno justifica su sueldo enviando un informe a sus jefes indicando que parece ser que Canon está cociendo un objetivo para el sistema M de luminosidad F1.2.
Otra cosa es que el pueblo llano se pregunte ¿ para que está Canon derrochando esfuerzos en un sistema en el que ni el mismo cree y nadie quiere ? Pero eso ya es otra historia.
La prueba del delito la podréis ver en el minuto 2:20 del video y la destaco en la imagen ilustrativa.
[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=6raSxmk3_4c[/youtube]
Qué ¿ es o no es dura la vida del espía ?
El tio de la foto es igual que Toni Iommi, el guitarrista de Black Sabbath. Tampoco me importa el objetivo.