Pero «que peazo bestia»
Damas y caballeros, señoras y señores, gentes de bien en general (inquilinos del Congreso de los Diputados debatiendo el estado de nuestra nación – abstenerse), pónganse sus mejores galas pues vamos a asistir a la primicia del análisis a fondo que Germán Pierre hace esta vez de una de las bestias pardas más pardas que han aparecido por nuestras selvas en los últimos tiempos.
Se trata del increíble, maravilloso, único y referencial Zeiss Otus 85mmF1,4, que con su estructura de acorazado ruso y su cristalería fina totalmente manual materializándose en un pepino retratero de 1.142 gramos, pretende erigirse en la referencia absoluta que el estado del arte cristalero puede conseguir a base de fundir arena y limarla con mucho cuidado después.
La prueba, claro está, se hace con la Nikon D810, que a la espera de las etéreas Canon 5DS’s, es la compañera natural de esta óptica.
Venga va, para reventar el artículo, y a conciencia, empiezo diciendo que «el asesino es el mayordomo», lo que debe se traducirse en estas dos ideas:
- En el apartado nitidez solo obtiene un 9,5. No llega a 10: anatema
- Su hermano Zeiss Otus 55mmF1,4 es un pelín mejor: anatema
Y ahora ya, aliviados y sin el ansia de saber la conclusión, podemos seguir con lo de siempre.
El análisis es como siempre muy completo, tocando todos los puntos esenciales: nitidez, contraste, distorsión, viñeteo, aberraciones cromáticas, todos ellos temas de importantes en el resultado y la sensación de la imagen final.
Pongo aquí los “a favor” y los “mejorables” de las conclusiones del artículo, e incluyo arriba la tabla de valoración, con las notas parciales de cada concepto analizado.
A favor :
- Nitidez en el tercio central desde plena abertura sobresaliente.
- Viñeteo y distorsión geométrica muy contenidos.
- Aberraciones cromáticas longitudinales y laterales muy controladas.
- Bokeh extremadamente suave y progresivo.
- Construcción, acabados y uso sobresalientes.
Mejorable:
- En el apartado de embalaje sería deseable una bolsa semi-rigida al nivel cualitativo del producto. La caja de guardado está muy bien realizada pero esa diseñada para su transporte.
- En el acabado externo, por apreciación personal, preferiría un tipo de caucho grabado y menos mate.
La tabla de la verdad: rozando el cielo, pero sin llegar.
Mirando la tabla de valoración podemos ver que, la nota media en el apartado calidad de imagen es de 9,5 sobre 10, con la espinita de que en nitidez se queda en 9,5. ¿ Será para que las señoras retratadas salgan más suaves y guapas ?
La nota global no está definida pues no es un objetivo muy versátil, casi exclusivamente retratero, pero sobre todo porque su precio de escándalo no es capaz de soportarlo ni siquiera la hoja de calculo EXCEL que usa Germán para hacer las media. Estallaría por «overflow».
En fin. Como conclusión, y siendo el tema tan especial, no concluyo nada y os emplazo a que leáis atentamente lo que cuenta Germán.
Realmente este Zeiss Otus 85mmF1,4 no es un objetivo para mi, y no podría decir lo mismo del Sigma 85mmF1,4 Art, que por calidad no le anda muy a la zaga, y por precio está a años luz de distancia.
Análisis completo en «Digital Camara Lens» ; Galería de muestras
Y no olvidéis, además, que Germán tiene una enorme base de datos. Hay muchísima información.
Este es otro de mis quieros y no puedo. Me da igual el embalaje y la bolsa, aunque lo del precio ya me importa un poco más.