Nos llega una débil prueba de vida de la Canon EOS 5DS-R con pico-muestras, desde el desierto de Nevada.

¿ Por qué será que más pronto que tarde me veo con esto en las manos ? Ay señor, no me defraudes, que la tentación es fuerte y la carne débil.

Bernardo, un miembro de nuestra Peña, me envía un enlace que demuestra , menos mal, que no hemos sufrido todos una alucinación colectiva y las Canon EOS-5DS’s existen en la realidad.

Resulta que un fotógrafo que se llama George Lepp que anda allá por la ciudad del pecado en el desierto de Nevada donde los rios bajan pletóricos de leche, miel y dólares, ha tenido la suerte de jugar con una Canon EOS 5DS-R y nos cuenta algunas cosas (muy pocas) de ella. Si, también hay muestras, pero imagino que por imperativo legal de esa ley del silencio impuesta por Canon, son de tamaño sello, así que no sirven para nada.

Destaco aquí lo que me ha parecido más representativo de lo poco que cuenta el suertudo de George:

• Los archivos RAW miden sobre los 60 MB.
• Los TIFF a 16 bits andan por los 300 MB, y la mitad si son de 8 bits.
• El rango dinámico es bastante bueno y parecido al de la 7D Mark II
• No usé ISO’s altos, así que no se que tal está el tema ruido.
• Usé objetivos como los EF 100-400mm MK II y el EF 11-24mm con un resultado excelente. El EF 24-105 no tanto.
• No aprecié ningún problema de «moiré» con la 5DS-R.

Como veis, no es ningún análisis, y las pocas consideraciones que hace son muy pobres, y desde luego nada halagüeñas. El que compare el rango dinámico de la 5DS-R con el de su 7D Mark II, a pesar de su enorme resolución, solo puede querer decir que el sensor, lo haya fabricado quien lo haya fabricado, no tiene el ADN Sonykon, y eso no es nada bueno, no señor, no es nada bueno.

Tal parece que Canon, sin duda presionando por la inmensa e insoportable presión mediática que estaba ejerciendo Fotochismes ¿ que son esas risas ?, se vio obligado a presentar las cámaras, pero lo cierto y verdad es que aún no están acabadas y están en ello. Toca esperar, y cuando salgan de verdad, tocará seguir esperando a que aparezcan los primeros análisis serios, sobre todo el de DxO Mark, y después, tiempo habrá de despotricar lo que haga falta si la cosa procede, o de aplaudir hasta con las orejas, si también procede.

La mini-prueba de vida