Manfrotto también se apunta, como no, a la parafernalia asociada al video y presenta su propio “new zero backlash follow focus” que no es otra cosa que un sofisticado manubrio para mover el anillo de enfoque de un objetivo de video con la suavidad y precisión necesaria para satisfacer los criterios estéticos del Spielberg de turno.
Como no dudo que querréis saber mucho más, aquí os dejo el enlace, y solo me resta decir, como aviso a navegantes, que la sofisticada ruedecita cuesta 520 £ en el imperio de el reelegido y exultante David Cameron, lo que en nuestra maltrecha Europa vendían a ser unos 725 euretes de nada.