El mío, y a mucha honra. Funciona perfectamente.
No seré yo quien os haga propaganda de ningún telefonillo, ni seré yo quien hable de las mutaciones genéticas que sin duda siguiendo las leyes de Darwin acabarán con la humanidad adaptada con manos más grandes para poder aguantar los tablefonillos cada vez mayores y con los dedos multiarticulados para poder mandar mensajes con mayor comodidad desde cualquier posición y en cualquier lugar. Tampoco os hablaré de los diferentes segmentos que existen ni de la cruel guerra de prestaciones/precios que los diferentes fabricantes libran para quedarse con el atribulado personal que asiste impotente al gran circo con la única pregunta no formulada de demonios habrán inventado esta vez para conseguir la necesaria obsolescencia tecnológica fundamental para que todo el mundo viva infeliz si no cambia de móvil dos veces al año estando cada vez más atado y conectado a un cibermundo del que con toda probabilidad no se si podríamos prescindir pero seguramente del que si podíamos depender bastante menos.
Bueno, pues como no seré yo quien os explique todas estas cosas, será Alberto Ballestín en persona quien os cuente las maravillas de un artilugio que se hace llamar bq Aquaris M4.5 y que os costará algo menos de los 200 euros.
Ya estáis avisados.
Alberto Ballestín en Que sabes de
