
Los viejos rockeros nunca mueren, pero lo normal es que acaben durmiendo el sueño de los justos en un armario.
No se yo si en los tiempos que corren este análisis será de interés general, pero al menos no hace daño a nadie y tiene el interés de saber que tal rinde el clasiquísimo objetivo Zeiss Distagon 50mm f/4 C sobre la clasiquísima Hasselblad 500 C/M equipada con la no menos clásica Fuji Velvia.
El rendimiento y el resultados, aunque aquí es lo de menos, os lo tendréis que creer y es un puro acto de fe, pues hay imágenes de muestra pero la digitalización se ha hecho a un tamaño de 1600 x 1600 píxeles, y una resolución de 2.5 Mpixels hoy en día haría enrojecer de vergüenza ajena incluso al más principiante de cualquier cursillo de iniciación fotográfica.
En fin, dicho lo dicho, es un análisis si más no, nostálgico.
El análisis lo hace el supergurú Ken Rockwell demostrándonos una vez más que no solo está a la última, sino que tiene y sabe de todo.
El ojetivo:
¡¡¡¡QUE PRECIOSIDAD!!!!