Una de bichitos, pero perfectamente enfocados.
A los amantes del macro seguramente esto les va a encantar, sin embargo puede que queden un pelín frustradillos al ver la parafernalia necesaria, desde la toma, hasta la impresión en plan poster salón de casa, para tener la imagen acabada.
Para conseguir una profundidad de campo «imposible», no es más que la conocida técnica del apilamiento, pero a lo bestia, llevada hasta el límite.
Si más no, es curioso de ver, aunque a mi me encantaría ver al concienzudo fotógrafo haciendo «apilamiento» en plena naturaleza con los huidizos bichitos o incluso con las tímidas flores y una ligera brisa de viento serrano.
¿ Lo que más me ha gustado ?, pues el Museo de Historia Natural de Oxford. En esos edificios y «colleges» ingleses parece que se respira ciencia ¿ no os parece ?
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Lo he visto en Caborian
