Yo empecé en el mundillo SLR con las Olympus OM-1 y la OM-2 allá por 1976-1980. Por ello me ha gustado mucho la evocadora glosa que acaba de publicar nuestro querido pozo de ciencia Valentín Sama sobre la medición TTL en tiempo real que empleaban de la OM-2 en adelante.
Fue una pena que Olympus dejara tirados a los suyos cuando apareció el autofoco y esa fue la causa de que muchos desertáramos de la marca. En realidad, y ahora que lo pienso bien, fue Olympus la culpable de que yo acabara en Canon hace ya un montón de años.
No me arrepiento en absoluto de haberme desecho de mi Canon EOS 5 de película al pasar al mundo digital, pero si me he arrepentido más de una vez de haberme vendido todo mi equipo Olympico (OM-1, OM2 y 6 ó 7 objetivos) cuando me pasé a Canon EF.
En fin, nostálgicos de la historia, pasad y conoced la cortinilla digital de una cámara que podía variar la exposición mientras estaba exponiendo.