El autor del flagrante delito es la firma Kúla, toda islandesa ella, y la criatura se llama Kúla Bebe.
Se da la circunstancia, que debe ser considerada como agravante, que la citada firma ya ha hecho adaptadores 3D para todo tipo de cámaras. Ahora simplemente lo presenta para telefonillos, así que se trata de una reincidencia.
La justicia será implacable, y la sentencia, ejemplar.
Bueno, no es «tirao» de precio, pero por lo menos no es ruinoso: «The Bebe can currently be preordered for $79 on the Kula website and delivery is expected in spring 2017».
- Lo he visto en Dpreview, pero hay más en la WEB de Kúla 3D
¿ Será posible, hombre ?. Después de escribir todo esto me doy cuenta que ya os había hablado de él hace dos años, si si, 25 meses, cuando era un proyecto KickStarter.