Es un trozo de camiseta: venga, hombre, que es muy fácil.
Sabemos que en el mundo hay sitios singulares, anomalías lo llaman algunos, donde hay gente que se divierte trabajando y encima les pagan.
Uno de esos sitios es el de la pequeña adivinanza que os he puesto en la imagen ilustrativa y que no dudo resolveréis de inmediato los de ciencias y solo unos pocos segundos después los de letras.
Pues bien, justo de ahí viene un divertimento que nos explica en un pequeño artículo Raphaël Terris y del que para seguir con el misterio solo os pongo este párrafo.
De momento se trata de un sistema bastante preliminar con bastantes limitaciones –se generan vídeos de muy corta duración y calidad rudimentaria, por ejemplo– pero el objetivo no es la calidad de imagen sino la “comprensión” de la misma para seguir perfeccionando los algoritmos de inteligencia artificial.
Más info para desentrañar el inescrutable misterio en:
