Yo creo que Hugo no se me va a enfadar si os cuento la película al revés. La película va de un exhaustivísimo análisis que acaba de hacer a un monitor grandote y de campanillas. Se trata del BenQ SW320 cuya tarjeta de vistita podría ser esta.
Vais a disfrutar más que el bueno de Trump aumentando estratosféricamente el presupuesto militar de Estados Unidos para volver a ganar guerras mientras sus amigos se hacen más de oro, saboreando las siete páginas del análisis completo, ya lo veréis.
- Resolución 16:9 de 3.840×2.160 (4K).
- Panel de 31,5” IPS de 10 bit, acabado mate y gama similar al Adobe RGB.
- Cobertura del 100% de sRGB/Rec709 y 99% de Adobe RGB.
- Calibración por hardware con el software Palette Master Elements y calibradores de EyeOne de X-Rite y Spyder.
- LUT 3D integrada de 14 bit y gran calidad, que permite modelar la gama de color con gran flexibilidad.
- Sistema de uniformización de pantalla.
- Presets calibrados de fábrica para sRGB, Adobe RGB, Rec 709 y DCI-P3, garantizando una desviación menor a DeltaE 2 en los tres primeros.
- Puede reproducir video UHD 4K HDR y HDR de 10 bits.
- Calibrada en fábrica individualmente para una curva de gamma precisa.
- Conexiones HDMI, DisplayPort y MiniDP. También, dos puertos USB 3.0, una toma para auriculares y un lector de tarjetas SD.
- Mando a distancia por cable para manejar los menús del monitor.
- Visera de serie forrada de terciopelo negro, adaptable tanto en posición horizontal como en vertical.
Bueno, pues la película acaba así, y que conste que solo os cuento el final para animaros a verla completa.
Conclusión:
El SW320 es uno de esos escasos monitores de un tamaño que la mayoría de usuarios apenas ha visto nunca, por lo espectacularmente grande de su tamaño y por ser además de la categoría más alta. Es cierto que no es un monitor para todo tipo de usuarios, ni por prestaciones ni por precio, pero también es cierto que hasta ahora estos monitores raramente bajaban de los 2.000 €. Con el SW320, fotógrafos avanzados, profesionales, editores de video tendrán una pantalla para grandes necesidades: fotos de alta resolución, panorámicas, video HD y 4K. Los diseñadores también disfrutarán de lo lindo gracias a su resolución de 140ppp, puesto que las tipografías y líneas finas se verán mejor que en ningún otro monitor, cuando se trata de ver el aspecto impreso.
La combinación de su tamaño 4K con HDR, su panel IPS de 10 bits, la gama Adobe RGB, los presets calibrados y lo fácil que resulta moverse por sus menús permiten disfrutar sin muchas complicaciones de tan alta tecnología. Si además añadimos la precisión de sus calibraciones de fábrica, el mando a distancia para los menús o la excelente visera, terminan de redondear un producto de por sí muy redondo. Y por unos 1400 €, realmente no se puede pedir más…
Queda claro, ¿ no ? Pues eso.