Cuando veo cosas así me acuerdo de mi Hassel criando polvo en el armario, y me da pena, penita, pena.
Oiga, pues un poco de cultural nunca viene mal.
Esta vez es un breve artículo de Fernando Marcos quien repasa diferentes aspectos del «peludo» asunto de los formatos de película, cosa que ahora es menos extrapolable a los sensores digitales, donde si no ando errado (que puede ser) solo cohabitan el 4:3 con el M43 y el 3:2 de todos los demás, desde 1″ hasta Formato Medio. Otra cosa muy diferente es que las cámaras ofrezcan a modo de recorte un montón de formatos más: 16:9, 1:1 y seguro que muchos más, pero eso es hacer trampa. Y otra cosa muy diferente es el tamaño del sensor, que a veces también llamamos formato, cosa que hasta puede ser correcta pues a lo otro deberíamos llamarlo «relación de aspecto». Huy, que lío me estoy haciendo. Ya me callo.
La verdad es que no está nada mal.
Nota tonta: la guerra de los formatos, la verdadera guerra de los formatos, está hoy en pleno auge y tanto Fuji como Hassel, y un poco menos Pentax, (todos con la tutoría de Sony detrás) tienen toda la culpa.
