Pero que cosa más, más, más ………… inmaculada.
El consejo de amigo que nos ofrece Fernando Galán después de la osadía que supone irse al campo a probar una Canon EOS 200D con el objetivo del kit y en un refulgente y níveo color blanco inmaculado, es que la maquinita es bastante más digna de lo que parece y que todo canonista que se inicie, aparte de considerar muy seriamente transfugarse a Nikon, Sony, Fuji o incluso Pentax ahora que aún está a tiempo, debe olvidarse para siempre jamás de la serie 1xxxx de Canon y lanzarse en brazos de esta 200D a pesar de que el ADN Canon no ha permitido ponerle un precio más acorde ni con sus prestaciones ni con la competencia.
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Yo en lo que pueda me empujo una, y no por moda es que hace tiempo le tengo sigo al paso libre de problemas pequeña compacta casi como una sin espejo no requiere anillos adaptadores una enorme gama de lentes, vamos que canon la pegó del techo con esta camarita…