Quien lo iba a decir. El desarrollo del EF85mm f/1.4L IS USM con un tamaño razonable y a un precio asequible provocó una guerra interna en Canon entre el departamento de planificación de producto y el de desarrollo cristalero que concluyó a porrazos, puñetazos, garrotazos e incluso puñaladas traperas con el diezmó considerablemente la plantilla de materia gris existente, lo que permitió al Sr.Canon contratar a unos cuantos becarios en prácticas que por la cuenta que les trajo solucionaron el problema en un periquete.
Así empieza la crónica de una guerra intestina que acabo con la derrota de todos los inocentes soldados y el otorgamiento de medallas a todos los generales de ambos bandos.
Cuando el departamento de planificación de productos solicitó el desarrollo de este objetivo, nuestro departamento de desarrollo cristalero inicialmente se sorprendió por el alto grado de dificultad en el diseño. Cuando se equipan objetivos de gran apertura con estabilización de imagen, la disposición del foco y los grupos de estabilización son factores importante para determinar el tamaño y el peso del objetivo. Los de gran apertura tienen, por diseño óptico, vidrios de gran diámetro. El grupo de estabilización de imagen, que es parte del sistema óptico, debe poder moverse para compensar el movimiento de la cámara, lo que naturalmente hace que el grupo sea más pesado. También se requiere una fuerza de accionamiento mayor para impulsar el grupo, lo que aumenta el tamaño y el peso del objetivo. Por lo tanto, la primera impresión del equipo de desarrollo fue que sería casi imposible desarrollar la lente de 85 mm f / 1.4 de tamaño razonable y precio atractivo con estabilización de imagen que el departamento de planificación de producto había solicitado.
Se que llegados a este punto ya no podréis dejar de leer, así que os dejo con los dos capítulos de esta apasionante crónica guerrera.
Si, aunque parezca mentira, todo esto ha salido a partir de Canon Rumors
Nota tonta: al mozuelo que aparece en la imagen ilustrativa, que se llama Iwamoto y que se declara, Optical Design Lead, es al que me gustaría enviarle mi trilogía para que, con especial interés, se leyera el capítulo 2 y me diera una cumplida respuesta que estoy esperando como agua de mayo.
- El culebrón de la renovación de mi equipo: 1.- Mi experiencia con la Canon EOS 5D Mark IV.
- El culebrón de la renovación de mi equipo: 2.- Mi profundo desengaño con el “nuevo” Canon EF 24-70F2.8 L II.
- El culebrón de la renovación de mi equipo: 3.- El descubrimiento del Canon EF 24-70F4 L IS
¿ Alguien sabe su dirección particular ?
- Nota tonta: 1.600 dólares es un precio totalmente razonable para el Sr.Canon. Son cosas del ADN.
Es lo normal ahora que las ópticas pesen cerca de un kilo, para compensar ese efecto te aligeran bien la cartera.
!Que lejos queda la época en que uno usaba filtros de 52 mm!
Ese es el problema, que abulta y, sobretodo, pesa un kilo a la canal. ¿Cuántas veces usamos 1.4? Ni siquiero uso 1.8… Esos pesos los veo correctos en estudio, en manos de un profesional para trabajo concreto, pero no al cuello de un aficionado, no en el mío. Ni en la bolsa.
No hace mucho que lo vi, es enorme. Veremos cuando vengas al 135 2.0 L IS cómo será
Es más pequeño que el sigma, no? Eso es lo único que debe pensar el Sr. Canon