Que no, que no, que te estas equivocando mi querido amigo. Antes de poner todos tus recursos en el diseño cristalero del mundo RF debes dejar cerradas todas las heridas del mundo EF, y ahí tienes algún que otro pecado que expiar.
La herida mas gorda que tienes abierta te la infligiste tu mismo cuando, sin decírselo a nadie, decidiste toquetear el EF 24-70F2,8L II (que hasta entonces era excelente) y ponerle un plano de enfoque más redondo que una pelota de playa convirtiéndolo así en inservible para paisaje. Aún no me he recuperado del disgusto.
La «tirita» con la que nos hemos consolados los afectados ha sido el EF 24-70F4L IS, que bueno, se las apaña, pero ópticamente no es una fiera y mecánicamente parece un juguete barato.
Lo que el pueblo llano reclama, exige, desea e incluso anhela es un nuevo EF 24-70F4 L IS II idóneo para paisaje, con un rendimiento óptico mejorado, sin tantas aberraciones cromáticas, y con una mecánica robusta que no haga temer por la integridad del barrilete cada vez que extiendes el zoom. Y mira que te lo pongo fácil mi querido amigo: ni te exijo un 24-70F2,8 ni tampoco un 24-105F4. Me contento con un 24-70F4. No me digas que no es una penitencia asumible para el perdón de tus muchos pecados, ¿ no ?