
Solo hay que buscarle un rincón en el salón.
Dan Wells, que en los últimos tiempos es el único que escribe algún artículo interesante en la otrora magnífica y gratuita Luminous Landscape, se marca hoy un ensayo en plan meditación metafísica que yo hubiera titulado: ¿ 60 Mpixels, para hacer qué ?, donde aborda el no por manido resuelto tema de: ¿ que hacemos con los Mpixels ?, que también se podría enfocar como: ¿ que vamos a hacer con nuestras imágenes ?
Imprimir vallas publicitarias está muy bien, pero seguro que me aceptáis que un poster de 3 metros no lo vais a mirar (normalmente) a 50 cm, ¿ no ?
Estoy seguro que debe haber por ahí (en el MIT seguro que alguien lo ha estudiado) cual es el número de Mpixels ideal para observar una imagen a tamaño completo, impresa o “displayada”, en función de la agudeza del ojo humano y de la distancia de observación.
No sería razonable mirar la diminuta pantalla de un telefonillo a 2 metros, ni tampoco la de una enorme supertele 8K a 30 cm, ¿ no ?
Pues eso, se trata pues de determinar una ecuación de este tipo: Mp = f (a,r,d), donde a = agudeza humana normal, r = resolución, y d = distancia o ángulo de visión.
Igual nos llevamos la sorpresa de que con 25 Mpixels es más que suficiente para todo.
Vale, soy el primero en aceptar que el sobre-muestreo nunca molestará y que para recortes va de miedo, pero a mi me gustaría saber ese valor mágico, si es que hay uno solo.
Hala, jóvenes doctorandos en matemáticas y física aplicada, aquí tenéis un reto.
Para amenizar la cosa os pongo directamente la entrada por la puerta de servicio:
Uyy, volvemos a tropezar en la
misma piedra, lo más importante de un archivo grande, no es la capacidad de ampliación que también, lo importante es la cantidad de información que se puede manejar en el revelado/procesado y que las pérdidas de información en cada paso, queden minimizados por la regla de proporción, cuanta más información menos se notan las pérdidas.