Seré más que breve pues a mi estos artilugios wearables me emocionan aún menos que los telefonillos, que ya es decir. Pero como me reconozco a mi mismo como una anomalía, os lo cuento por si os apetece echarle un vistazo.
En este caso el artilugio en cuestión es un reloj, bueno, en realidad es un gadget en el que lo que menos importa es que de la hora.
Yo también tengo un reloj, es clásico, pero es de esos que se ponen en hora solos con la señal de radio de la estación DCF77. Funciona perfectamente y, chúpate esa Sr.Apple, la pila le dura 10 años.
Tecnólogos profesionales, aficionados, y curiosos en general, todos los detalles están en:
No, lo siento mucho pero esta vez no hay palmeras. El guión no lo exigía.