2

Conoce a Lagarto: un gota de optimismo en el océano de desgracias.  

Esa cara de alegría lo dice todo.

Vale, es solo un primer escalón, pero es un escalón ilusionante y que yo no creía posible, os lo digo con toda sinceridad, en este convulso rincón de todas las Españas. Quizás por eso me ha hecho más ilusión aún.

Enhorabuena.

Nota nada tonta: creedme si os digo que me habría hecho la misma ilusión si la cosa hubiera pasado en cualquier otro lugar de nuestro país. Lo digo de verdad.

adolfo

2 comentarios

  1. Así es, soberanía alimentaria, energética y tecnológica, o, con perdón, nos comeremos los mocos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.