
¿ To video or not to video ?: that’s the question.
En un primer momento el título del artículo me ha llenado de esperanza y he pensado, mira, un alma gemela que se ha planteado el por qué, siendo toda la parafernalia y liturgia del video (objetivos, accesorios de todo tipo, y modos de trabajo) tan distinta y específica, la cámara debe ser la misma que para hacer fotos.
Leyendo sus argumentos me ha sentado como si me tiraran por la cabeza un cubo de nitrógeno sólido, así que no seguiré ahondando en la herida abierta y sangrante en mis propias carnes.
La argumentación, he entendido yo, tiene estas dos sólidas bases:
- En el video hay mucho margen de mejora, en la foto fija muy coco. El astuto fabricante mejora las características de video como casi único argumento diferenciador a la hora de vender.
- El hardware para hacerlo todo ya lo hemos pagado, así que presentar una cámara que solo haga fotos será más caro y no más barato que una cámara mixta, aunque solo sea por economía de escala.
De lo anterior se deduce que a aquellos a los que el video no nos hace tilín ni nada parecido, la única esperanza que nos queda es que se siga avanzando en las habilidades para la lectura electrónica del sensor hasta alcanzar el soñado obturador electrónico integral en un amplio abanico de velocidades y sin efectos secundarios: entonces habrá llegado el mundo «mechanicless».
Como guinda del pastel os pongo aquí el último párrafo del artículo en versión google aderezada con algunas gotas de mi IA HAL9000 Mark III que tengo guardada en un cajón y solo la saco para ocasiones especiales.
En ese momento quizás lo mejor, en lugar de enfrentarse a lo (casi) inevitable, puede ser mejorar en la implementación de las características y funciones del video de modo que no se interpongan en nuestro camino como fotógrafos. O tal vez, podríamos ceder a la tentación (en mi caso inexistente) y probar el video. ¿ Quién sabe ?, hasta podría ser que nos guste (mi querida Madre del Amor Hermoso no lo permita).
Resumen ejecutivo: el video en las cámaras de fotos, al igual que el COVID-19, ha llegado para quedarse y, al igual que el «joio bicho» permanece agazapado en nuestras maquinitas esperando la ocasión para infectarnos cruelmente si un día por casualidad nos equivocamos de botón.
Si estáis ansiosos por dedicar horas y horas a la profunda meditación sobre tan trascendental tema, no seré yo quien os lo impida.

– el «iris» electrónico integral LCD –
la idea que me va a sacar de la miseria,
pero solo si me doy prisa con la patente
Nota tonta: para tener una verdadera “mechanicless” total no solamente hay que tener un obturador electrónico integral. También debemos disponer de un “iris” electrónico en el diafragma. Eso no es ningún problema, yo ya lo inventé hace varios eones y que sepáis que, como burro que soy, no he patentado la idea.
- Recordatorio: Ftc 31-7-2018
Parece que la tendencia será fabricar cámaras de vídeo que hagan fotos.
Por cierto: ¿con el tiempo, necesitaremos que los objetivos tengan iris?
Miedo me das……….
Yo creo que si, pero será el que menciono en el artículo y aún no está inventado.
La lytro illum iba hacia una apertura de diafragma virtual, pero no funcionó