En este glorioso sábado de gloria en que la temperatura nos ha dado un respiro, aunque solo sea momentáneo, y me encuentro ahora en mi despacho a unos gloriosos 25,1ºC, he recuperado mis funciones vitales y me encuentro en plenas facultades para contaros este “destello analógico/peliculero” que si más no me ha parecido de lo más curioso.
Y de paso me he enterado de lo que quiere decir “Lomo”: ¡¡¡ fascinante!!!
Espero que disfrutéis de la curiosidad, y sobre todo de la temperatura.
La google presentación sería más o menos esta:
¿Cuáles fueron las cámaras de 35 mm más producidas de todos los tiempos? ¿Quizás el Argus C3, el Olympus Trip 35 o quizás el Nikon F? No, esas cámaras ni siquiera se acercaron al número de Smena-8 y Smena 8M de la era soviética que salieron de la línea de montaje; un total combinado de 21 millones. La siguiente más cercana de las cámaras mencionadas es la Olympus Trip 35 con 5,4 millones de unidades fabricadas.
Entonces, ¿cuál es el problema con estas cámaras aparentemente ubicuas, producidas por Leningradskoye Optiko-Mekhanicheskoye Obyedinenie (Lomo), de las que muchos de nosotros probablemente nunca hemos visto / oído hablar? Nuestros buenos amigos de Kosmo Foto tienen la primicia completa y más.
La explicación completa está en:
Lo he visto en: