Este artículo va dedicado a mi amigo Hugo Rodríguez que además de sabio ahora es un aguerrido piloto de drones. Seguro que algo así ya se le ha ocurrido, pero por si acaso no es así comparto este breve tutorial con él y con todos los miembros de nuestra µPeña que tengan una máquina voladora o incluso que a parir de esta nota piensen en pedírsela a Papá Nöel o a los Reyes Magos, que me han asegurado personalmente que este año también pasarán, eso sí, ataviados con mascarilla para ellos y para sus renos y camellos.
Que interesante efecto, Adolfo! Gracias por avisar. Lo probaré!!