Tenía yo mucho interés por conocer el rendimiento de este cristalito pues como todos sabéis ya hasta el aburrimiento es uno de los que el Sr.Canon me regalará en concepto de desagravio por los muchos e insoportables disgustos que me ha dado en los últimos años, sobre todo a partir de noviembre del 2017 cuando se produjo el «affaire» de la curvatura de campo con la que os he machacado aquí de forma cruel, despiadada, inmisericorde y pesadísima.
- Una Canon EOS-R5 (para paisaje)
- Una Canon EOS-R6 (para florecillas macro)
- Un RF 24-70mmF2,8L IS USM (para paisaje)
- Un RF 70-200mmF4L IS USM (para paisaje)
- Un RF 85mmF1,2L USM (para retrato)
- Un RF 100mmF2,8L IS USM Macro (para macro de florecillas)
Después de mirar con atención lo que cuenta el análisis y sobre todo la galería de muestras creo poder afirmar que podría acostúmbrame a él sin demasiado esfuerzo, sobre todo delante de una EOS-R5 incluso con su inexplicable y absurdo filtro AA.
Sr.Canon, le doy mi aprobación y ya puede ir empaquetándomelo.
Si os pica la curiosidad y queréis saber alguna cosa más, cosa del todo improbable después del exhaustivo resumen ejecutivo que os acabo de hacer, aquí os pongo los enlaces y también la google conclusión del análisis.
Veredicto
Con el RF 70-200 mm f4L, Canon mostró una vez más cómo un nuevo objetivo puede igualar o superar el rendimiento de un clásico popular al tiempo que agrega algo diferente, en este caso un diseño mucho más compacto, al menos cuando se establece en 70 mm. Canon tenía un trabajo difícil en sus manos, ya que el EF 70-200 mm f4L Mark II anterior ya era una de las herramientas más afiladas y una que se actualizó solo un par de años antes, además de que es más barato y, por supuesto, se puede adaptar con éxito al Sistema EOS R.
La nueva versión RF se las arregla para igualar el modelo EF a largas distancias, mientras se vuelve un poco más nítida a corta distancia para retratos y aún más para macro. En mis pruebas, también demostró ser más consistente y preciso al enfocar imágenes fijas en el R5 que en el lente EF, y también un poco más suave y más seguro para el enfoque de video.
Sin embargo, lo que hace que la lente RF sea realmente especial es su tamaño, un poco más grande que una lata de 330 ml cuando se hace zoom a 70 mm y considerablemente más portátil que la versión EF, particularmente cuando el adaptador está equipado para cuerpos EOS R. Sin embargo, el cañón extensible es un arma de doble filo, ya que es demasiado pronto para saber sobre el sellado a largo plazo. Al igual que la versión RF 2.8, el diseño óptico lamentablemente descarta el uso de teleconvertidores RF y también da como resultado una respiración de enfoque significativa donde el aumento se reduce a distancias de enfoque más cercanas, esto a su vez significa que puede enfocar casi el doble de cerca que el modelo EF , el tamaño de la imagen resultante es aproximadamente el mismo. Algunos también pueden preferir la reproducción de fondo ligeramente más suave del objetivo EF.
La conclusión es que el EF 70-200 mm f4L Mark II más antiguo sigue siendo un objetivo excelente y si ya tiene uno o menos para gastar, me quedo con ese modelo. Pero si aún no posee un f4 de 70-200 mm, la combinación de una calidad óptica excelente, un enfoque preciso y un diseño sorprendentemente compacto hace que la versión RF sea muy atractiva y valga la pena gastar más. A los fotógrafos de eventos y retratos les encantará su calidad, confianza y portabilidad, y es otra lente que hace que el sistema EOS R sea tentador para los nuevos compradores.
¿Otra vez «me namorao»?
Lo mejor es el macro a tan solo a 0,60 cm que tiene que ser una maravilla para dejar planos desenfocados en macro….lo que no me gusta nada es que no se le puedan poner los duplis… y prefiero el tubo no extensible , muchísimo mas limpio y seguro para fotos en el campo.
Seguiré con el fantástico EF 70-200 f4L IS ( I ) que va de perlas!!!