De vez en cuando, cuando baja el Espíritu Santo en forma de lenguas de fuego y les afea la conducta por dedicarse solo a los telefonillos, la gente de DxO Mark se arrepiente de sus pecados y prueba alguna cámara o algún objetivo.
Siempre me ha parecido que las métricas, gráficas y tablas de DxO Mark en el mundo de la cristalería son un tanto especiales, difíciles de interpretar y en absoluto comparables con otros probadores de prestigio. Sin embargo tienen fama de objetivos y rigurosos y por ello me voy a autoimponer la tortura de leerme un par de veces con atención su protocolo de pruebas cristalero, y si saco alguna conclusión os la haré saber de inmediato.
Dedico esta breve nota a mi amigo Germán Pierre.