En un alarde de audacia asumo que como la mayoría de los pianos son tan negros como en porvenir de nuestro país en particular o de la humanidad en general, un blanco “piano” debe referirse al blanco de las teclas de susodicho instrumento y por lo tanto estamos hablando de un blanco “marfil” y así nos entendemos todos.
Desfacido ya el entuerto, despejadas las dudas y con el ánimo sereno, podemos seguir, aunque no hay mucho más que contar
Pues bien, esto ya de por sí ha sido la brexit práctica de hoy que ha quedado reducida simplemente al titular.
Para dudas o ampliación de las mismas, razón aquí: