Cuando uno constata que la única virtud de un objetivo es que es barato, pero en calidad de imagen obtiene un 8 sobre 10 (discretísimo para los baremos de esta WEB) y sin embargo una valoración final de “altamente recomendable”, uno, de naturaleza malpensado, tiende a pensar que mi ex-amigo Kazuto Yamaki ha cuidado muy bien la liturgia de los maletines danzarines.
Eso es lo que ha pasado en el análisis a fondo que acaban de publicar en Photography Blog, pero no me hagáis caso, seguramente estaré totalmente equivocado, como casi siempre.
Mirad, ved, valorad y opinad por vosotros mismos.