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33 Mpixels son más que suficientes para cualquier situación fotográfica normal y ofrecen un muy buen compromiso entre la nitidez final y la exigencia a los cristales.
Lo primero que ha hecho mi torturada mente es compararla con la Sony Alfa 7R IV en RAW.
33 Mpixels son más que suficientes para cualquier situación fotográfica normal siempre que sea observada por un fotógrafo normal. Si el susodicho fotógrafo es un neurótico de la nitidez y además paisajista la cosa se complica en extremo. Además, los cristales están para hacerlos sufrir, ¿no? Pues eso. Mientras más información, mejor, que para quitar siempre hay tiempo.
Señor, que cruz, pero que cruz más grande.
