Hace ya semanas que la prestigiosa OL amenaza con analizar la tríada ATX-M 56-33-23mmF1.4 E para Sony E, y hoy, domingo de pasión en que estamos a punto de librarnos de la cuesta de enero para entrar en la cuesta de febrero, publican el análisis del primero de ellos.
Yo estaré atento y os lo contaré puntualmente conforme vayan apareciendo los demás:
30-1-2022: Tokina ATX-M 56mm f/1.4 E
¿Y cómo sale la cosa?
- Hombre, pues discretita, ¿para que nos vamos a engañar?, y más si consideramos que es un objetivo fijo y solo con cobertura APS-C.
¿Y qué dice el abogado del diablo?
- Pues dice que por 430 dólares, ¿qué más queréis?
Bueno, digan lo que digan, digan lo que digan los demás, lo que OL dice es este google veredicto.
Veredicto
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Tras nuestro análisis de la versión para montura Fujifilm, el rendimiento del Tokina atx-m 56mm f/1.4 E ya no es tan sorprendente. Tiene sus méritos con un par de salvedades. En cuanto a la nitidez, puede ofrecerla donde más importa para un objetivo de este tipo: en el centro de la imagen más amplio. Los bordes y las esquinas son suaves a f/1,4 y f/2, pero más allá, son bastante decentes y realmente nítidos en los ajustes de apertura media. La CA lateral y las distorsiones de la imagen están en un nivel moderado, aunque se pueden detectar en escenas críticas. El viñeteado puede ser evidente a f/1,4. El objetivo no tiene un perfil de corrección, por lo que habrá que hacer un esfuerzo manual si se quiere arreglar esto.
En cuanto a los criterios de suavidad, la calidad del bokeh es sin duda un punto fuerte de este objetivo. Las luces desenfocadas son muy limpias a f/1,4 y siguen siendo circulares, excepto en las esquinas lejanas. El desenfoque general también es suave. En el lado negativo, la CA axial (franja de bokeh) puede ser notable a grandes aperturas. En las escenas difíciles con un fuerte contraste, también se puede tropezar con el fringing púrpura.
Gracias a un cuerpo totalmente metálico, un anillo de control suave y un enfoque interno, la calidad mecánica es sorprendentemente alta. A diferencia de la mayoría de los objetivos con montura E, cuenta con un anillo de apertura sin pasos que puede resultar útil para el trabajo en vídeo. Sin embargo, no cuenta con ningún tipo de sellado contra la intemperie. La velocidad de AF es moderada pero sin ruido.
El aspecto más difícil en torno al objetivo Tokina no es su rendimiento, sino la gran cantidad de competencia a la que se enfrenta en la montura E.
- Calidad óptica: 6 sobre 10 (justito para ser un fijo)
- Calidad mecánica: 8 sobre 10 (razonable)
- Precio/Rendimiento: 8 sobre 10 (razonable, pero mejoraría con 100$ menos)
Sin duda querréis comprobarlo todo. Pues nada, por mi que no quede. Os recuerdo que esta WEB es intraducible.
Oh sorpesa, la madrugada del día siguiente, que es hoy lunes, aparecen los otros dos.
31-1-2022: Tokina ATX-M 33mm f/1.4 E
¿Y cómo sale la cosa?
- Hombre, pues discretita, ¿para que nos vamos a engañar?, y más si consideramos que es un objetivo fijo y solo con cobertura APS-C.
¿Y qué dice el abogado del diablo?
- Pues dice que por 400 dólares, ¿qué más queréis?
Bueno, digan lo que digan, digan lo que digan los demás, lo que OL dice es este google veredicto.
Veredicto
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El Tokina atx-m 33mm f/1.4 E tiene un buen rendimiento, pero comparte algunos puntos débiles con los otros objetivos primarios de Tokina que hemos revisado recientemente. La resolución central más amplia ya es muy buena a f/1.4, mientras que el campo de imagen exterior podría ser mejor. La reducción a f/2.8 soluciona la mayor parte de la suavidad de los bordes/esquinas y los resultados son muy nítidos a partir de f/4. La CA lateral es bastante baja y, por lo general, no hay que preocuparse por ella. Es posible que se detecte un poco de distorsión en corsé, por ejemplo, si se dedica a la fotografía de arquitectura. También hay un viñeteado evidente cuando se dispara a f/1.4, pero no es algo fuera de lo común para un objetivo tan rápido. El objetivo Tokina no cuenta con un perfil de corrección integrado, por lo que hay que solucionarlo manualmente si es necesario. Sin embargo, con el tiempo debería haber perfiles de corrección disponibles en la mayoría de los convertidores de RAW. Un aspecto positivo es la calidad del bokeh. Se deteriora un poco en las esquinas lejanas, pero en general es muy agradable. Esto es especialmente cierto para los puntos de luz desenfocados. Sin embargo, la franja de bokeh (Axial CAs) está en el lado alto.
La calidad de construcción del objetivo Tokina es bastante alta. Al igual que sus primos de la casa, el Tokina atx-m 33mm f/1.4 E está bien ensamblado y la mayor parte del objetivo es de metal, incluido el parasol. Una característica inusual para un objetivo tan asequible es el anillo de apertura dedicado. No tiene pasos y está más alineado con el uso de vídeo, pero no tuvimos problemas para utilizarlo en las fotos. El AF es moderadamente rápido, pero no hace ruido. Las actualizaciones de firmware son posibles a través de un puerto USB, así que esperemos que el objetivo reciba un perfil de corrección de imagen en algún momento.
En general, el Tokina atx-m 33mm f/1.4 E es un objetivo con una buena relación calidad-precio pero con algunas pegas.
- Calidad óptica: 6,5 sobre 10 (justito para ser un fijo)
- Calidad mecánica: 8 sobre 10 (razonable)
- Precio/Rendimiento: 8 sobre 10 (razonable, pero mejoraría con 50$ menos)
Sin duda querréis comprobarlo todo. Pues nada, por mi que no quede. Os recuerdo que esta WEB es intraducible.
31-1-2022: Tokina ATX-M 23mm f/1.4 E
¿Y cómo sale la cosa?
- Hombre, pues discretita, ¿para que nos vamos a engañar?, y más si consideramos que es un objetivo fijo y solo con cobertura APS-C.
¿Y qué dice el abogado del diablo?
- Pues dice que por 450 dólares, ¿qué más queréis?
Bueno, digan lo que digan, digan lo que digan los demás, lo que OL dice es este google veredicto.
Veredicto
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El Tokina atx-m 23mm f/1.4 E es un objetivo con múltiples personalidades. Es bastante nítido en el centro de la imagen con ajustes de gran apertura, pero el campo exterior de la imagen es suave. Para ser justos, esto es probablemente perdonable en la mayoría de los escenarios del mundo real cuando se utiliza f/1,4 o f/2. Las imágenes son, sin embargo, muy nítidas cuando se reducen a una apertura media. El fuerte viñeteado también puede ser evidente a f/1.4. El CA lateral podría ser un poco mejor a f/1,4 y f/2, pero, una vez más, se puede controlar reduciendo un poco la apertura. Las distorsiones de la imagen son muy bajas y eso sin ninguna corrección digital. El bokeh es mejor que en la mayoría de los objetivos de esta categoría. Las luces desenfocadas se reproducen perfectamente cerca del centro de la imagen, aunque las esquinas no son tan buenas en este sentido. Sin embargo, la transición de enfoque es muy suave. Sin embargo, la CA axial puede ser visible en escenas críticas.
La calidad mecánica del Tokina atx-m 23mm f/1.4 E es alta, como siempre. Está bien montado y la mayor parte del objetivo es de metal, incluido el parasol. Los amantes del vídeo también apreciarán el anillo de apertura sin pasos. Desgraciadamente, no hay sellado para la intemperie, aunque probablemente no sea algo inesperado en esta clase de precio. La velocidad del AF es comparativamente moderada, pero las operaciones son silenciosas. Es posible actualizar el firmware a través de un puerto USB integrado. Esperemos que Tokina proporcione pronto una actualización de firmware con un perfil de corrección, porque esta característica se echa en falta.
En general, el objetivo Tokina no es perfecto, pero combina el potencial creativo de un diafragma de alta velocidad y un precio razonable.
- Calidad óptica: 5,5 sobre 10 (un poco pobre para ser un fijo)
- Calidad mecánica: 8 sobre 10 (razonable)
- Precio/Rendimiento: 8 sobre 10 (razonable, pero mejoraría con 150$ menos)
Sin duda querréis comprobarlo todo. Pues nada, por mi que no quede. Os recuerdo que esta WEB es intraducible.
Corolario final y nota del editor:
Aunque parezca que en los tres pone lo mismo, no es así. He copiado la estructura del primero pero en cada uno he puesto lo que cuenta la prestigiosa WEB para cada uno de ellos.
El resumen ejecutivo más ejecutivo y resumido que se puede hacer sonaría algo así.
- Son dignos, ma non troppo: ¿captáis la idea?