
Esta es la más pequeña que he encontrado, pero os juro que la primera que tuve, que venía de muestra con mi Canon PowerShot S60, fue de 16 MB.
Moraleja: si tienes una cámara con Compact Flash y eres «sueldominimointerprofesionalista» o pensionista, un buen consejo es salir corriendo para agenciarse repuestos antes de que desaparezcan para siempre en las páginas de la historia.
Bien, pues esta muestra os sirve para saber de qué va la cosa. Todo es más o menos así.