Realmente el tamaño si importa.
Richard Butler, uno de los capitostes y escribientes de Dpreview, se ha ido a un partido de Rugby y ha hecho las suficiente fotos como para darnos su opinión sobre la primera maquinita del mundo OM System trabajando en fotografía deportiva como los más afamados ladrillos Pro’s de la competencia.
¿Y qué le ha parecido? Hombre, pues Richard cuenta muchas cosas, pero yo os voy a poner solo el párrafo final que es este:
No es una Z9, pero tampoco es una cámara de 5500 dólares, y parece rendir mucho más de lo que la diferencia de precio podría sugerir. Chris y Jordan tienen previsto hacer una prueba junto a la R3, y yo espero hacerla con mejor luz, en las próximas semanas. Pero a partir de esta experiencia, la OM-1 parece más bien una alternativa más pequeña y asequible a los equipos deportivos profesionales, en lugar de una evolución gradual de los buques insignia de la era Olympus.
Todo lo demás, o bien lo podéis imaginar, o bien lo podéis ver aporreando los siguientes enlaces:
La verdad es que el artículo deja muy bien a la OM1+ 40-150 f2.8 pro en lo que ha rapidez del AF se refiere. Ninguna queja sobre el posible ruído de la imagen final.
Destaco un comentario: «No he examinado cada una de las 1608 imágenes que tomé durante el transcurso del partido, a nivel de píxeles, pero mi impresión general es que el OM-1 lo hizo extremadamente bien.» Y, ojo, que el referente en el artículo es la Nikon Z9.
Si siguen la misma política que la antigua Olympus, es esperable que haya todavía margen de mejora via firmware.
Sea como sea, que se situe a la OM1 (2.199€) al mismo nivel de comparación que la Nikon Z9 (6.499E) y que se anuncie una comparativa con la Canon Z3 (6.299€) es muy revelador de las carasteristicas y prestaciones que se le atribuyen a la nueva Olympus-OMS.