Dando tumbos por la red de redes (algunos lo llaman navegar) uno se siente como una pelota de ping-pong aporreada por la paleta de un campeón chino tuerto, y en esas estaba yo cuando he caído en una peliculita patrocinada por Joan Vendrell donde Tino Soriano nos habla de los misterios del color en fotografía.
Tampoco es que sea nada excepcional, pero para un pre-Domingo de Ramos donde todo el mundo, creyentes o no, han salido de estampida hacia unas esperadas vacaciones sin mascarilla dejando internet vacía de contenido, pienso que está bastante bien y espero que os guste.
Joan Vendrell y Tino Soriano
Y ahora, como bonus track y solo posible gracias a la ilimitada generosidad de esta casa, en uno de esos “rebotes pelotiles” que mencionaba antes, he ido a parar a este breve tutorial sobre macro de florecillas, y como mediocre aprendiz de estas cosas y me he sentido aludido.
Discrepo profunda y hasta violentamente con el ponente y con todos los ponentes que a mano alzada hacen unas fotos increíbles. No puede ser: es imposible que la florecilla o el bichito salga enfocado salvo que seas capaz de inmovilizar con un campo de fuerza tipo StarTrek hasta la última molécula de aire del entorno. Doy fe.
El ponente en este caso es Micael Widell y jura que en su canal tiene 64.600 suscriptores
Yo soy Adolfo, y en mi canal, que es un Blog, no tengo ningún suscriptor, pero hace unos meses tenía una femtoPeña de 713 personas de los cuales hay 24 héroes que encima han aporreado el botón de “donar” cuando se lo he pedido. Es increíble, ¿verdad? Muchas gracias a los 24, por hacerlo, y a los otros 689 por aguantarme.