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¿No disfrutarías haciéndote una selfie 3D tocable y movible?

– alegoría Marveliana –

Aquí os enteraréis de todo, con el “making of” incluido.

Yo me voy a pedir la mía ya mismo, pero dudo que cerebro pedir: el de Einstein, el de Newton, el Plank, el de Higss, el de Carl Sagan, el de Sthepen Hawking, no se, siempre he deseado pedir prestado uno de ellos para poder ver el mundo como ellos lo veían, aunque solo fuera por 5 minutos. Seguiré pensando.

adolfo

Un comentario

  1. Esa tecnología es muy buena, la precisión de detalles de algunos scaners 3D asequibles va mejorando y los materiales de impresión son cada vez más variados. Recuerdo los primeros hologramas decorativos que ponían en algunos bares o discotecas como vanguardia decorativa.
    Este uso que dan en el reportaje que nos muestras es un poco o un mucho friki, pero seguro que los niños estarán encantados de poder jugar con muñecos que son ellos mismos o el vecinito de enfrente. Yo pienso en poder hacer réplicas de seres vivos que en su día he hecho modelando, si la fotografía permitió la representación de una realidad a quién no tenía dotes de pintor esta tecnología y por ejemplo, la del cálculo de profundidades a partir de una foto bidimensional, permiten hoy hacer una escultura a quién no tiene esas dotes de modelista o no tiene tiempo.

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