Asegura el fabricante que con estos auriculares ya no necesitarás hacer cola nunca más para escuchar a una orquesta sinfónica ni para encontrarte sumido en una íntima Jam Session totalmente acústica.
Sin embargo yo muero de angustia por no saber qué demonios es el audio espacial con seguimiento de la cabeza
¿Será que en la imagen estéreo que se forma en el cerebro cuando te fijes en la izquierda oirás más los instrumentos de ese lado y cuando lo hagas en la derecha destacarán los de ese otro lado? Ostras, eso sería ideal: cuando salga un político por la tele bastaría dejar de mirarle para dejar de oírlo. Lo compro. Póngame dos pares.
Como sabéis yo de joven fui audiófilo. Mis operaciones de “estapedectomía” en 1991 lograron que dejara de serlo, y ahora, 30 años después estoy al borde del sonotone, aunque me resisto como gato panza arriba. Lo cierto es que me cuesta entender la tele, y si me hablan dos personas no entiendo a ninguna.
Todo eso es una suerte pues estoy exento de veleidades audiófilas.
En fin, que hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad en:
El milagro se produce aquí dentro: