– alegoría cincuentona –
No os voy a poner nada del artículo, pero si que os voy a poner su pie de página con una no tan breve biografía del autor que se llama Benjamin Olson y que presenta un “curriculum” nada corriente y en cierta manera envidiable.
Ben Olson
A lo largo de mi vida, he estado constantemente expuesto al mundo natural, ya fuera a través de la pesca, la caza, la acampada, el piragüismo o el senderismo. Estoy muy agradecido por las oportunidades que mis padres me brindaron generosamente, sobre todo porque me crié en los suburbios de Minneapolis y St. A los 16 años tomé la decisión de matricularme en un instituto alternativo llamado School of Environmental Studies (SES) en Apple Valley, Minnesota. Fue allí donde mi vida empezó a transformarse para mejor, ya que fui expuesto a la conciencia ambiental, la conservación y un estilo de vida al aire libre. Poco después de empezar a estudiar en el SES, mi abuelo, al que estaba muy unido, enfermó de forma terminal y me regaló mi primera cámara. No sabía entonces cuánto cambiaría mi vida esta herramienta. Los cinco años siguientes los pasé descubriendo y conociendo los bosques, lagos, animales y plantas de los alrededores, mi cámara y, lo que es más importante, a mí mismo. Unos años después del instituto, decidí empezar a estudiar biología con especialización en ecología, etología y evolución en la Universidad Estatal de Bemidji, en el norte de Minnesota. Al mudarme a Bemidji en 2009, me sentí eufórico de inmediato; era como si me hubieran quitado un peso de encima. El estrés y la ansiedad que conlleva vivir en las ciudades desaparecieron y la vida se volvió sencilla. A medida que avanzaba en mi educación en Bemidji State, empecé a comprender la interconexión entre el mundo natural y todos sus habitantes. La verdadera importancia del mundo natural se me había revelado gracias a la inmensa cantidad de tiempo que pasé en el bosque y a la información que me transmitieron mis profesores. Estaré eternamente agradecido por este periodo transformador. Mi vida gira en torno a la naturaleza. Paso la mayor parte de mi tiempo libre en el bosque con mi cámara. Espero provocar emociones en los demás a través de la fotografía e inspirarles para que descubran las maravillas del mundo natural. Soy licenciado en Biología, con especialización en Ecología, Etología y Evolución, y en Tecnología de la Imagen Digital. Mis objetivos a largo plazo son incorporar mi educación y la fotografía para promover la conciencia de los peligros que el mundo natural se enfrenta hoy en día mientras se trabaja hacia la conservación y restauración del medio ambiente.
- http://www.benjamin-olson.com/
- Benjamin Olson (651)-242-2357
- https://www.facebook.com/BenjaminOlsonPhotography
Y ahora si, aquí están los simpáticos ositos, siempre que los dejes en paz y no te acerques demasiado.
Consideración impertinente:
¿Sabéis lo que más me ha fascinado, asombrado, sobrecogido y angustiado del asunto? Pues que al pie de artículo pone esto:
During this trip, I used a Canon 1DX Mark II, 7D Mark II, 6D, 16-35mm f/4L, 24-70mm f/2.8L II, 100-400mm f/4.5-5.6L II, 400mm f/2.8L IS USM, and both the 1.4x and 2.0x teleconverters.
¿Cómo es posible que habiendo usado el Canon EF 24-70F2,8L II no haya sacado los osos curvos?, ¿cómo es posible que habiendo usado el Canon EF 24-70F2,8L II no haya arrasado hasta los cimientos la sede central de Canon USA, o Canon Japón, o todas las sedes de Canon en el mundo?
Si yo tuviera un billete abierto para todas las aerolíneas del mundo y fuerzas para hacerlo las brigadas de limpieza de todo el mundo tendrían que emplearse a fondo para recoger con pala y escobilla las cenizas de todas las sedes que lucieran el logo Canon. He dicho. Hala.
