Una afirmación como la del titular suena demasiado rotunda y por eso Álvaro Mendez no lo asegura sino que se lo pregunta.
Y para auto responderse y de paso ilustrarnos a nosotros pequeños saltamontes ha jugado un buen rato con él y nos cuenta lo que le ha parecido.
Pero antes de acabar, y en un acto de extrema maldad, voy a “spoilear” el resultado con este subliminal párrafo que termina el análisis quitándole toda emoción a asunto.
No podemos perder de vista que el RS 3 Mini cuesta menos de 400 euros, y por ese precio nos parece una fantástica opción para estabilizar el equipo básico de grabación de casi cualquier creador de contenido. Y en un tamaño que cabe en cualquier mochila o bandolera.
Hala, a hacer puñetas la sorpresa.
Ostras, si a mi me gustara el video y supiera encontrar donde está el botón de grabación de mis cámaras, igual este artilugio era un accesorio de lo más útil.