Hace ya tiempo os conté mi aventura con el 2G de Telefónica. Yo tenía un telefonillo 2G y era más que suficiente para mi. Resulta que me quedé sin cobertura en mi casa y alrededores, Despues de tropecientas llamadas al 1004 y unos cuantos enfados me enteré de que Estación Base 2G de mi barrio se había estropeado y que Telefónica no la pensaba arreglar. Después de darme con la puerta en las narices mi única posibilidad era cambiar mis telefonillos por unos más modernos 4G. Así lo hice y me compré dos Nokia 1, uno para mi mujer y uno para mi. Ambos eran pequeños, baratos y suficientes. Por aquellos milagros del software mal hecho los telefonillos tenían vida propia, se descargaban solos y hasta llevaban a calentarse peligrosamente: eran una protobomba. No tuve más remedio que volverlos a cambiar. Esta vez lo hice por un par de Xiaomí 5G, de los baratitos. Estos funcionan mejor y aunque también tiene vida propia no me han dado hasta ahora ningún disgusto.
En esta maravillosa sociedad en la que nos hacen vivir han logrado que el telefonillo sea imprescindible así que hasta nosotros nos hemos acostumbrado a usarlos y a llevarlos por la calle, eso si, en el bolsillo, nunca delante de la cara ni en la oreja, y por supuesto siempre desconectados de internet.
Esta es pues la historia de una “eutanasia” obligada (la del 3G) y de una muerte anunciada (la del 2G) que empezó ya hace mucho tiempo y durará hasta que falten componentes o voluntad para reparar averías.
¿Habéis pensado ya en vuestro telefonillo 6G?
Bonus Track:
Esto es ya para partirse de risa. No solo España va bien, sino que Europa va bien, y UUEE ni te digo. El mundo va tan bien que al mismísimo Tim Cook, Papa de esa religión que se llama Apple, le ha sido revelado por su jefe Steve Jobs que está haciendo el imbécil por cobrar lo que cobra por los iPhones 14, y que él, que todo lo ve desde las alturas, sabe que la gente estaría encantada de pagar muy por encima de los 2.000 $ con tal de tener un iPhone aún más grande, bonito y potente.
Así pues, mis queridos súbditos applemaníacos, dentro de nada deberéis perder toda esperanza de tener un último fetiche Apple por menos de unos miserables 2.000 dólares de nada.
Entiendo que esta tendencia será Trending Topic y será abrazada con entusiasmo por el resto de fabricantes que se confabularán todos juntos para hacernos creer que seremos unos desgraciados y unos parias de la sociedad si no compramos cada 6 meses el último modelo de todas sus criaturas. A fe mía que lo consiguirán, porque así somos de burros y nos dejamos.