Ya lo he dicho alguna vez, y hasta ahora mi querida Madre del Amor Hermoso me ha perdonado. Ahora lo voy a volver a decir y espero que también me otorgue su divino perdón.
A mi la Canon EOS-R6 Mark II me gusta, y me gusta mucho, hasta el punto de que creo es la “mirroless” más sensata y equilibrada que ha salido de la factoría del Sr.Canon. Hasta estaría dispuesto a que me la regalara a portes pagados para florecillas macro, junto con la nonata Canon EOS R5 Mark II para paisaje, acompañada con una maleta del mejor surtido de objetivos RF. Si tal cosa aconteciera, que no acontecerá, hasta me plantearía eso de transfugarme a mirrorless con la A7R V, la A7 IV, y la maleta de todos los GMaster. Fijaros hasta que punto llega mi absurda devoción canonista. Hasta estaría dispuesto a publicitarlo en este Blog con lo cual los ecos de la noticia su repercusión mediatíca llegaría a millones de usuarios. Si hombre si, si contamos la audiencia diaria todos los días durante los 12 años de Fotochismes llegamoa a varios millones. El hecho de que siempre seáis los mismos es un pequeño detalle sin importancia que por ahora voy a obviar.
Claro que la EOS R6 II estaría mucho más guapa si en lugar de 2.500 $ allí y 3.000 € aquí, costara 2.000 $ allí y 2.500 € aquí, y la guinda del pastel sería que tuviera 30 Mpixels en lugar de 24 Mpixels, pero claro, no se le pueden pedir peras al olmo, y el Sr.Canon ha demostrado a lo largo de su dilatada historia que ya es un olmo centenario.
Bueno, pues que sepáis que la siempre objetiva, rigurosa, omnipotente y amazónica gente de Dpreview le ha otorgado el codiciado “Gold Award” y que por una vez, dicho con la boca pequeña, sin que sirva de precedente y mucho menos siente jurisprudencia (que para eso ya tenemos al justísimo y estupendísimo juez Marchena), estoy de acuerdo.
Conclusión
Lo que nos gusta… | Lo que nos gusta bastante menos… |
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Enloquecidos de angustia por saberlo todo, razón en: