Vamos a ponernos en situación porque esto va a ser un juego de ROL.
Imagínate por un momento que tienes la terrorífica obligación moral de regalarle a tu “cuñao” un buen telefonillo para que haga buenas fotos con él. Imagínate que la obligación moral es ineludible pues fue tu “cuñao” quien te hizo la maniobra de Heimlich cuando te atragantaste en Noche Buena con la raspa del Besugo al Horno tamaño tiburón blanco que guisó tu madre, salvándote así la vida.
Pues bien, en esa terrible tesitura esta guía “aconsejatoria” igual te sirve de consuelo. Eso si, ves preparando una base de 1.000 €, que eso no te lo quita nadie.