
Bueno, pues vale.
Con la tranquilidad de espíritu que da saber que nuestro Rey Demérito ya está en su Palacio Dorado del Resort de hipermegalujo de Abu Dabi, acompañado por su nieto Froilan que trabaja (me encantaría saber de qué) en una importante empresa petrolífera propiedad del jefe y amigo de nuestro Demérito por el SMI de la zona de 7.000€/mes, y que Victoria, la hiperdelgada influencer y otra nieta del susodicho anda por la Feria de Abril montada en su caballo y coceando a todo el que se le pone por delante, tengo la inmensa satisfacción de contaros que Dpreview ha pasado a un estado cuantico.
Efectivamente: en física cuántica una partícula puede estar en dos estados a la vez, como el famoso gato de Schrödinger.
Así pues Dpreview está muerto porque sus amos y señores la han matado, pero a su vez está vivo y tan vivo que hasta se atreve a publicar un análisis a fondo de una cámara nueva, y ese análisis lo ha tenido que hacer cuando ya sabía que estaba muerto. Por lo tanto concluyo que Dpreview ha entrado en una etapa o estado de estar “semimuerto”, de lo cual yo me alegro mucho y espero que se prolongue en el tiempo lo máximo posible.
Dicho lo cual, esto es lo que nos google cuentan desde el equipo zombi de la cuántica Dpreview:
Conclusión
Lo que nos gusta | Lo que nos gusta bastante menos |
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La R10, al igual que sus pares de nivel medio, está tratando de responder a la pregunta de cómo hacer que una cámara dedicada sea relevante en el mundo de los teléfonos inteligentes. ¿Vale la pena cargar con lo que puede ser un dispositivo incómodo y voluminoso que hace lo que ya hace tu teléfono? Habiendo usado el R10, diríamos ‘Sí’.
La capacidad de controlar la velocidad de obturación, usar el seguimiento AF o montar un teleobjetivo, si está tomando fotografías de la vida silvestre o del partido de fútbol de sus hijos, son todas razones para adoptar el R10. Pero lo más importante es que estás comprando un dispositivo que te da control sobre tus imágenes y te hace sentir que estás jugando un papel activo en el proceso creativo, en lugar de marcar un círculo en la parte inferior de la pantalla de tu teléfono.
La R10 es fácil de usar para principiantes y su simplicidad la convierte en una herramienta rápida para empezar a disparar y divertirse. Muchos de sus elementos de menú más complejos se presentan con descripciones dirigidas a los recién llegados; por ejemplo, el sistema AF utiliza íconos y texto breve para brindar información de múltiples maneras. En particular, el sistema AF simple y confiable hace que el R10 sea más fácil de obtener resultados que muchos de sus pares.
Si usted es un fotógrafo o camarógrafo ocasional o intermedio, alguien que toma imágenes principalmente de vacaciones, fiestas de cumpleaños, retratos familiares o deportes juveniles, la Canon EOS R10 es una cámara muy capaz que puede crecer con usted, ofreciendo la flexibilidad y el potencial para intensifica tu juego de fotografía. Si eso suena como usted, dele una buena mirada al R10. Pero si está buscando una cámara para ‘crecer’, vale la pena verificar si las lentes que desea están disponibles.

– la tabla de la verdad: hombre, no es una Sony A7R V o una A1, pero tampoco está mal –
Y el análisis completo, como en los viejos tiempos y que dure, está aquí:
Pregunta hipertonta: por qué el Sr.Canon no adapta todos sus objetivos EF-M a la montura RF, le costaría muy poco y ya tendría una buena base APS-C, ¿no? Como siempre los designios del Señor son inescrutable, y los del Sr.Canon más aún.